La Casa del Dragón es una de esas series que no deja nunca de sorprendernos, habiendo impactantes revelaciones o situaciones imprevistas en cada uno de los episodios, como ha sucedido en el sexto de la temporada dos titulados "El populacho", donde en los minutos finales asistimos a una escena entre Rhaenyra y Mysaria durante uno de sus encuentros privados para discutir la estrategia a seguir.
La Casa del Dragón se caracteriza por fraguar sus líneas narrativas a fuego lento, nada está incluido sin previamente haber dejado un rastro de migas de pan que explique lo sucedido. Esto es lo que ocurre entre Rhaenyra y Mysaria, habiendo comenzado a forjar ambas un vínculo especial desde que Rhaenyra libera a Mysaria y posteriormente esta última salva la vida a la reina al alertarla de la presencia de Arryk en Rocadragón. A partir de este momento, con el paso de los episodios, Mysaria va adquiriendo mayor relevancia en la trama, sirviendo de consejera en las sombras de Rhaenyra, hasta el punto de ser ella quien le recomienda que se gane al pueblo de Desembarco del Rey, para sacar ventaja en el conflicto que se avecina, todo ello a cuenta de la falta de recursos.
A pesar del diferente estatus, Rhaenyra y Mysaria tienen evidentes paralelismos entre ellas, sintiendo una soledad que las va uniendo cada vez más. Hasta ahora, Mysaria había sido una persona misteriosa y hermética de la cual sabíamos muy poco, pero en este episodio 6 se abre por completo a Rhaenyra, contándole aspectos muy íntimos de su pasado relacionados con su persona, como es el caso de la procedencia de las cicatrices que tiene en su cuerpo y la revelación de que no puede tener hijos, todo ello provocado por su padre, quien era un maltratador. Este momento de revelación desemboca en un beso entre Rhaenyra y Mysaria, hasta que son interrumpidas por las noticas de que el dragón Bruma tiene nuevo jinete.
La impactante nueva dinámica entre Rhaenyra y Mysaria ha sido abordada por la actriz de esta última, Sonoya Mizuno, quien durante una entrevista con TV Insider, ha explicado cómo se ideó el romance antes incluso de la realización de la primera temporada.
Después de conseguir el trabajo y hablar con los showrunners, me dijeron que esto era una posibilidad. Dijeron que el plan era definitivamente que Mysaria y Rhaenyra empezaran a trabajar juntas con un potencial romance. Así que lo supe antes de que empezáramos la temporada 1. Creo que fue cuando recibimos los guiones de la temporada 2, y al final de este episodio, recuerdo que decía: "Sus frentes se tocan. Solo hay aliento entre ellas. Y luego lo que sucede a continuación se interrumpe". Pero no definía qué fue lo que sucedió, y tuvimos muchas conversaciones al respecto en la preproducción y durante la producción, pero tanto Emma como yo sentíamos firmemente que no queríamos que el momento fuera de ninguna manera un cebo para homosexuales, así que eso fue lo que pasó. Pero también hubo una especie de búsqueda de la verdad de ese momento y su relación, y se sintió muy bien que fuera hacia donde iba. Fue una especie de decisión colaborativa llegar a donde llegó.
El beso entre Rhaenyra y Mysaria no estaba incluido en el guion
Mizuno ha afirmado que la escena del beso no estaba originalmente presente en el guion, pero el día de rodar la escena, tanto ella como Emma D’Arcy tomaron la decisión de que era mejor incluirlo, habiéndolo dejado previamente los guionistas a su discreción.
Sí, fue una discusión muy constante en la preproducción y la producción. Creo que en algún momento se decidió que debía ser un beso. Debería ser íntimo. Pero no planeamos cómo sucedió ese momento hasta el día, y fue Emma quien sintió en ese momento que Rhaenyra quería abrazar a Mysaria y consolarla. Había sido muy abierta con ella y quería consolarla. Creo que el abrazo fue, en cierto modo, muy esclarecedor para ambas porque no creo que ninguna de las dos haya sido abrazada de esa manera. Quiero decir, ¿cuándo ves a la gente abrazarse en La Casa del Dragón? Ves a la gente f***ando y ves a la gente dándose palmadas en la espalda. Había algo en ese momento que se sentía tan emocionante de estar tan íntimamente conectadas, y luego se sintió tan orgánico pasar al beso a partir de ahí. Creo que nuestra relación tiene una especie de franqueza, y estuvo ahí desde el principio. Mysaria dijo: "Así soy yo". Tenían esa franqueza entre ellas, por lo que llegar a ese lugar se sintió orgánico, y tampoco se sintió de ninguna manera serpenteante o manipulador de ninguna de las partes.
La escena del beso entre Rhaenyra y Mysaria abre un nuevo escenario en La Casa del Dragón, consolidando la relación de cercanía entre ambas, pero en un contexto donde deberán ocultar sus muestras de afecto de cara a la opinión pública por el bien de las aspiraciones de Rhaenyra a hacerse con el trono, pues una revelación de este calibre la pondría en entredicho, provocando a buen seguro la ira de Daemon, siendo este una pieza clave para derrotar a los Verdes. La realidad es que esta es la misma tesitura en la que se encontraban Alicent y Criston Cole hace algunos episodios, intentando que no se supiese su relación, ya que estaría mal visto que la reina hubiese pasado página tan pronto.